Las implicancias de estudiar enfermería.

 

En el momento en que uno empieza a estudiar la carrera de enfermería siente que el ámbito laboral en el que se va a desempeñar en el futuro va a ser color de rosa y lleno de experiencias agradables. A medida que vamos avanzando en el cursado de las materias y comenzamos las prácticas de campo nos damos cuenta que  las situaciones no son siempre como las imaginamos, muchas veces  uno siente que uno no puede más, que el estrés y todo por lo que sucede nos está venciendo, que nos encontramos con problemas de difícil solución y que con la voluntad no alcanza. Nos empezamos a dar cuenta que para ejercer la enfermería y sentirnos agradecidos por elegirla, debemos hacerlo  con el corazón.

Una vez una profesora en la carrera nos dijo que si no sentimos y no nos ponemos en el lugar del otro es tiempo de retirarse y, hoy en día, siento que tiene razón en realizar esa afirmación En las prácticas es cuando te das cuenta si enfermería es la carrera que queremos hacer por el resto de la vida, cuando estás ahí y ves el dolor que siente una madre cuando tiene a su hijo recién nacido en Neonatología, o cuando un hijo o un hermano tiene a un familiar en un estado crítico y sentís ganas de ir a abrazarlo y prometerle que todo va a estar bien, pero al mismo tiempo estás aprendiendo que es algo que no se debería hacer y tampoco podes evitar sentir un poco del dolor que esta sintiendo la otra persona. Muchas veces, cuando llegamos a nuestro hogar, no podemos evitar seguir pensando lo que pasó ese día en las prácticas o en el trabajo, que brindando cuidados con nuestra mejor predisposición y empatía pudimos llevar alivio a la persona que está sufriendo y a sus familiares, es esa satisfacción la que te hace dar cuenta que enfermería es lo tuyo.

Es una carrera que en toda su magnitud se hace corazón porque, para cuidar, se debe realmente amar realizar esa acción, la de cuidar al otro. No solo tenemos que cuidar y educar al paciente, también lo tenemos que hacer con la familia, explicarles lo que estamos haciendo e intentar llevarles la máxima tranquilidad posible haciendo nuestras tareas de la mejor manera, apelando a todo nuestro conocimiento, herramientas y recursos.

Mientras estas estudiando y preparando para rendir los exámenes parciales y finales te replanteas muchas cosas, muchas veces dan ganas de llorar y de dejar todo, pero cuando uno se detiene a reflexionar y nos damos cuenta que elegimos una carrera tan maravillosa, que te enseña a crecer como persona y que siempre te vas con una enseñanza nueva, encontramos la motivación y el empuje necesario para seguir.

Ojalá haya más personas en el mundo que conozcan y se animen a elegir esta profesión tan linda como necesaria, tan llena de amor y de sabiduría. En todos los ámbitos siempre se aprende algo nuevo, pero con enfermería tenemos la garantía de que va a suceder todo el tiempo.